Dios es un Dios de orden, tal como se evidencia en sus obras de creación y redención. Por lo tanto, el orden pertenece a la esencia de su iglesia. El orden se alcanza por medio de principios y normas que guían a la Iglesia en sus operaciones internas y en el cumplimiento de su misión al mundo. Para que sea una organización eclesiástica exitosa al servicio del Señor y de la humanidad, necesita orden, reglamentos y disciplina. Las Escrituras afirman: “Hágase todo decentemente y con orden” (1 Cor. 14:40).
(Manual de la Iglesia, p. 17).
MANUAL DE LA IGLESIA
Explora sus páginas para conocer cada sección y los temas específicos que refuerzan las creencias fundamentales y la unidad de la Iglesia Adventista del Séptimo Día.
ARTÍCULO
Comprende cómo las directrices y orientaciones del Manual de la Iglesia ayudan al desarrollo espiritual de los miembros y al crecimiento de la organización adventista.
Desde la iglesia local hasta la sede mundial, conoce los niveles administrativos que trabajan para fortalecer la fe, la enseñanza de la Biblia y para apoyar distintas iniciativas dirigidas a los miembros, los vecinos y la sociedad.
Uno de los principales frentes en los que trabajan los adventistas es precisamente la asistencia social y humanitaria a miles de personas, lo que está en sintonía con el ministerio del propio Cristo.